A veces tienes que ser una puta
para que las cosas se hagan como tu quieres
(madonna, the rolling stones files)
para que las cosas se hagan como tu quieres
(madonna, the rolling stones files)
Salimos de la cocina y seguimos bailando y coco le dio bastante champán a la Nathalie y al ratito ya se la estaba chapando ahí delante de mí y yo me senté en la alfombra, de espaldas a la ventana, y vi cómo él le empezó a manosear las tetas, la fue apachurrando, le fue arrimando el piano mientras mecano cantaba; vi cómo la besuqueó en la boca, en el cuello, en el pecho; cómo le empezó a acariciar las tetas, echados ya en la alfombra, Nathalie estonaza y borrachaza y sin saber bien dónde estaba, sabiendo sólo que quería tirar rico con su coquito, y él le abrió el pantalón y se lo bajó y se echo encima de ella y la chupeteó y le mordió el ombligo y mordisqueó sus mulos duritos y le lamio despacito el coñito hasta hacerla gemir de placer, y luego se bajó la bragueta y se sacó la pinga grande, gorda, durita, con la cabecita afuera, y entonces sentí que se me ponía dura, y comencé a tocarme mientras coco la torturaba a su chata mañosa, porque no se la metió de golpe, y ella mojadita reclamaba pinga a gritos, pero él no, pendejazo le pasó la pinga por los labios carnosos de la chuchita, se la pasó una y otra vez, como si fuese desodorante en barra, y ella vibraba de placer, los ojos cerraditos, el cuerpo enterito pidiéndole pinga, y coquito canchero y coquerazo y castigador poniéndole la pinga y esperando el momento y yo no puedo más, me la estoy corriendo, y él se la hunde en el húmedo coñito y empieza a moverse y yo sólo veo el culito blanco de coco moviéndose delante de mí y la voy a dar, la voy a dar.